jueves, 16 de junio de 2011

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No me enamoré de el por su cuerpo o por que fuera guapo, me daba igual la verdad. Me enamoré de él por como era, por su manera de pensar y por su manera de animarme. Me enamoré de él porque ver su sonrisa por la mañana era lo más bonito del mundo. Porque cuando él se acercaba, solo para decirme enana, me hacía feliz. Porque el me entendía cuando me quejaba de todo, porque me aguantaba día tras día sin quejarse. Porque me quería y simplemente por el echo de existir me hacía la persona más feliz del mundo.
Y puede ser que me enamorara de la persona equivocada, que tanta perfección me hiciera decir tonterías, que no fuera lo que mejor me venia en esos momentos, pero lo de enamorarse, no se puede elegir, cuando te enamoras, te enamoras y punto. Y sí, es un poco tarde para decir todo esto, pero me da igual. Son de esas cosas que si no dices, revientas.

es así,

Cada día estoy más convencida de que no sabes lo que tienes asta que lo pierdes . Que llegas a un momento de tu vida , en el que luchas por tenerlo hasta la muerte si hace falta , y después de tanto y tanto esfuerzo , lo consigues .Sí , en ese momento , es en el que te sientes la persona más feliz del mundo , pero pasan las horas , los días , las semanas , y cada vez le das menos importancia a aquello por lo que un día luchaste tanto , llegas al punto de preguntarte ¿Realmente mereció la pena? ¿Y si es un capricho? te planteas cosas tan difíciles.. por orgullo no haces nada , pero sigues pensando y pensando.. Hasta que un día lo pierdes , no sabes como ni porqué , pero si , es así . Y ahí , en ese momento , es cuando te das cuenta de que era lo más importante de tu vida , de que sin ello , no puedes seguir . Ahí , es cuando realmente sabes asta que punto puedes llegar a amar a alguien.